Nunca vayáis un lunes a Burgos si tenéis la intención de pegaros un caprichito de los míos. Resulta que la mayoría de los grandes restaurantes que tiene esta ciudad, están cerrados o a medio gas ese día. Es más, confieso que acudí a este restaurante como segunda opción ya que había reservado mesa a través de "Réstalo" en "La Abbadía" (Hotel Abba) para probar el menú degustación de Antonio Arrabal (Top Chef). Resultó que estaba cerrado y que me había dado un fresquito paseo en balde. (Conclusión: No reservéis a través de Réstalo)
Pero cómo bien se suele decir, no hay mal que por bien no venga. Y es que el Rincón de la Merced lo tenía marcado desde hace tiempo ya que la cocina de Agustí Gebellí se ha ganado el reconocimiento de los burgaleses, de la guía Repsol (les galardonaron con 1 Sol) y de todo el que haya pasado a comer por ese magnífico hotel reconstruido por la cadena NH. Eso si, si queréis probar la carta o el menú degustación, tiene que ser de martes a domingo. Los lunes sólo disponen de un menú del día o ejecutivo por 28€ que es el que tuve yo el placer de probar (medio gas).
Pero la visita, aunque sea un lunes, siempre merece la pena. Es más, el menú es bastante atractivo y tiene alternativas para todos los gustos. El precio es muy ajustado para la calidad que ofrecen bajo mi punto de vista. Y además tiene detalles cómo el snack de bienvenida, que es un recurso muy utilizado por grandes restaurantes cómo este, pero que siempre se agradece.
Hablando del snack, el que me sirvieron a mi fue una sopa de miso con anguila ahumada y tofu. Caldo potente dónde los haya, cargadísimo de sabor y con los alegres tropezones que a parte de dar una interesante textura al plato, aportaba más sabor aún. Especialmente la anguila que con el toque ahumado redondeaba un aperitivo sobresaliente. Una manera perfecta de encarrilar el cuerpo en un día de frío, cómo era el caso.
De entrante me pedí tomate corazón de buey con ventresca, cebolla roja y brotes. Probablemente la mejor ventresca de atún que haya comido en la vida. Pero si algo destacaba del plato era el tomate. No recuerdo haber comido un tomate tan rico en mi vida. Ni los que recogía mi abuelo en su huerto. Que sabor, que intensidad ... ¡QUE TODO! Una auténtica locura que hace del plato algo único de una receta francamente sencilla. Producto diez tratado de diez.
De segundo aposté por la carrillera de ternera guisada en su jugo con verduritas. Todo muy bien ejecutado para rendir homenaje a todo un clásico de nuestra gastronomía. La carne tenía un sabor espectacular, la salsa estaba increíble con un puntito subido de vino que me enamoró y las verduritas jugaban un papel muy segundón pero aportaban ese crack que todo buen plato ha de tener. La patata es el único pero de este plato ya que tenía los bordes demasiado tostados para mi gusto.
Con estos maravillosos precedentes, enfilé el postre con el ánimo por las nubes. Unas frutas laminadas con zumo de naranja fue lo que cerró la comida. Un plato que demuestra lo bien que selecciona los productos este restaurante, que con un "sencillo" menú me ha demostrado que es total merecedor de ese Sol Repsol que tienen en su haber. Una distinción que muy pocos tienen. Por algo será.
El Rincón de la Merced es un sitio de visita obligada si te gusta la buena cocina de producto. Si el menú se te queda corto, puedes elegir el menú degustación que tienen por 57€ con maridaje incluído. Sinceramente han sobrepasado mis expectativas, y lograron hacerme disfrutar cómo un auténtico enano.
¿Cuando decís que vais a Burgos?
DIRECCIÓN: Calle de la Merced, 13 - Burgos
TELÉFONO: 947 479 900
WEB: nh-collection.com
FACEBOOK: facebook.com/rincondela.merced
INSTAGRAM: No tienen cuenta
TWITTER: No tienen cuenta
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